Hoy no os voy a hablar sobre una enfermedad rara o poco frecuente, hoy os voy a hablar sobre una serie de medicamentos: los medicamentos huérfanos (como veréis a continuación, están muy relacionados con las enfermedades raras).
Según la Unión Europea, un medicamento huérfano es aquel que:
- Se destine a establecer un diagnóstico, prevenir o tratar una enfermedad que afecte a menos de cinco personas por cada diez mil (o sea, una enfermedad rara).
- Se destine al tratamiento de una enfermedad grave o que produzca incapacidades y cuya comercialización resulte poco probable sin medidas de estímulo.
Estos medicamentos responden a necesidades de Salud Pública pero no son desarrollados por las industrias farmacéuticas ya que no son rentables (no se desarrollan por razones financieras).
El proceso que va desde el descubrimiento de una nueva molécula a su comercialización es largo (10 años de media), caro (varias decenas de millones de euros) y mu poco seguro (de 10 moléculas ensayadas, solo una tendrá efecto terapéutico). Por lo tanto, desarrollar un medicamento dirigido a tratar una enfermedad rara no permite recuperar el capital invertido para su investigación. Las empresas que producen este tipo de medicamentos suelen ser las mismas que fabrican los demás pero necesitan de una financiación especial (los gobiernos suelen ser los únicos que pueden proporcionarlas).
Cristina Paz
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